domingo, 12 de septiembre de 2010

Un partido entre dos



"Como un perro atropellado por el Metropolitano". Así me siento, causita. Me han pasado por encima con una gracia sutil que duele pero gusta. Pica y arde como ají panca. Ya no da rabia, alucina, a estas alturas del partido solo esperas el pitazo final y que se acabe el partido de una maldita vez, que entonces se mechen todos los jugadores y que anulen el partido para que todos tengan la culpa y te sientas menos peor (¿así se dice no?).


Así es.


Claro pues, después de tanto showball ocurre que, como-quien-no-quiere-la-cosa, yo le había tirado lenteja a esa personita que ni menos imaginaba me haría alucinar feo con maripositas y brillantinas. Pasa que, nada es como uno quiere que pase, primo, que nada sucede a tu antojo y ya ves, ahora todo cojudo he perdido la batalla más sencilla y criminal de todas, la del amor.


Pídeme una cervezita más causachum. Pa' que resbalen las penas así rapidín pues. Ta' que hace sed, hace penas, hace ratos que no concibo la idea de que la figura haya girado así de la nada ¿Me entiendes?. Ta' que una cosa es que te cancelen a sabiendas pues, osea la clásica derrota, loco, ya sabes que vas a perder pero igual sigues pa' ganar experiencia, por dignidad pura, por amor a la camiseta, pa' no quedar como un huevofrito, pa' jactarte de haberla luchado hasta el final como un buen warrior. Por otro lado, cuando no sabes que vas a perder es jodido cuñau, tú te computas que todo va a salir nais y que las palomitas van a volar bacán, que van a venir los cachorritos y la familia va a crecer y, conchesumá, todos tus patas van a querer a ser los padrinos y se van a pelear pa' ser los namberuan y toda la cosa. Pero mentira pues, nada más reality que la vida misma, la loca me choteó en wan, me puso el parche altoque, me hizo pisar tierra apurao': "Nunca me voy a casar con un escritor misio, yo quiero un verdadero hombre, un hombre que maneje camioneta, y que sea una 4x4, pliz!" Pa' que dijo eso cholario, ¡un miónca!, y yo que ahorraba pa' comprarle una steishonvagon para su movilidad personal (y pa' taxear por las noches cuando la cosa esté brava), me la bajó en una, me negó la posibilidad de convertirse en la doña y dueña de mi vida. Era mentira, causita, igual nunca se va iba a casar conmigo, sé que solo me dijo eso para barajarla lindo y no ser tan atorris. Me revienta que me dejen colgao', hermano, nunca voy a encontrar a la costilla de mi vida, a alguien que me haga piojito por las noches.


Don Beto viene con una chelita fresca, bien sudadita. La seca con una franela vieja.


Gracias maestro. Bueno, como te seguía diciendo, yo ya no sé si llorar o reír, si sentirme culpable o culparla de todito, como te dije, solo espero el pitazo final para que se acabe toda esta vaina. La firme que duele pues, es como tener una astillita en el bobo, es así chicoma y parece insignificante, pero por eso mismito, es más difícil sacarla, se adentra mucho más. Pero hablando así, entre varones, verdacita que me canceló bien con lo del billete. Yo no tengo, compare', ¡y que ni piense que por ella voy a conseguir más de lo necesario ah! porque eso ya es codicia pues, y Diosito castiga, ya sabes. No pensé que se me desviaría así, mano', que me vería como una mina de oro. Al final los dos nos ensartamos pues, ninguno era lo que esperaba del otro, fíjate que el destino es sabio pa' repartir los golpes, pero igual duelen pues, no hay nada que hacer cuñau...


Es triste verlo decaído y borrachoso, se me parte el alma en dos, sobre todo cuando sé que tiene la razón.


Estamos viendo el partido de la "U", son 3 puntos vitales para lograr el campeonato que estamos perdiendo por culpa de un empate inmerecido.


"Va Rabanal peligrosamente hacia el área y disparaaaaa/ataja el portero a medias y se le chorrea el balón/ cuidado con Cachito que puntea la redonda/la toca milagrosamente con el botín y es gol/ GOL DE UNIVERSITARIO DE DEPORTES!!!/ GOL!!!!!!!!!!!!!!!"


Nos abrazamos y gritamos a más no poder, brindamos como locos y lloramos de felicidad por ese glorioso gol esperanzador, que no es más que una moraleja inesperada del azar.


Termina el partido, resultado final Universitario 1 - Total Chalaco 0 .


Ya vez - le digo - tranquilo hombre, no todos los partidos se pierden.


Y entonces nos reímos de la vida como nunca.







X.